Mantequilla de nueces: 5 recetas para hacer en casa

Las nueces son un alimento milenario lleno de beneficios para nuestra salud. Son grasas buenas, aportan pocas calorías y nos generan sensación de saciedad, además, se pueden consumir de muchas formas y una de nuestras favoritas es en mantequillas o cremas que puedes hacer en tu casa de manera fácil y económica. 

Aquí te damos 5 recetas de mantequilla de nueces versátiles y diferentes para que las ensayes tu mismo:

1. Mantequilla de almendras: la mayoría de estas mantequillas de nueces tienen el mismo proceso, con algunas diferencias. Para esta mantequilla necesitas: 200 gramos de almendras crudas sin sal, aceite de coco y sal. Preparación: en un tazón vierte las almendras con dos cucharadas de aceite de coco y una pizca de sal, mezcla con tus manos hasta que todas estén bien untadas del aceite. Llévalas al horno durante 15 o 20 minutos a una temperatura baja, ve revisando que no se quemen. Sácalas y déjalas enfriar. Luego llévalas a un procesador de alimentos. Con paciencia procesa poco a poco hasta obtener una consistencia cremosa. En esta parte del proceso puedes agregarle un cuadrito de chocolate al 70% o del porcentaje que prefieras si quieres darle un sabor a chocolate.

2. Mantequilla de marañón: el marañón es uno de los frutos secos más nutritivos que existen, son buenísimos para acompañar ensaladas y snacks, y la mantequilla es una de las más ricas. Para hacerla necesitas: 300 gramos de marañón crudo sin sal, una cucharada de miel de abejas y pizca de sal marina. Lleva los marañones al horno durante 10 minutos a una temperatura de 150º C, revisando que no se vayan a quemar. Retíralos y déjalos enfriar. Llévalos al procesador y a medida que se va volviendo cremoso vierte la miel y la pizca de sal. Esta mantequilla es un poco más demorada, pero vale todo el tiempo del mundo por su delicioso sabor.

3. Mantequilla de maní: esta es la receta más clásica. Siempre deliciosa para niños y adultos, es una mantequilla que no debería faltar en tu despensa. Para hacerla necesitas: 250 gramos de maní crudo, pelado y sin sal, una cucharadita de aceite de oliva, pizca de sal y una cucharadita de azúcar o algún endulzante (opcional). Empieza por llevar el maní a un sartén a fuego bajo durante 5 minutos revisando que no se quemen, si se queman la mantequilla quedará amarga. Deja enfriar y llévalo a la licuadora o procesador. Empieza a mezclar y agrega el aceite de oliva, la sal y el endulzante si así lo deseas. Si se te hace una mezcla muy gruesa, sepárala y ve licuando por partes hasta que logres la consistencia deseada.

4. Mantequilla de macadamia: esta es una de las recetas de nueces más sencillas de preparar, aunque el proceso es más lento. Para hacerla necesitas 200 o 300 gramos de macadamias crudas y una cucharada de aceite de coco o de oliva. Sin tostar, lleva las macadamias al procesador, pero no toda la cantidad, divídelas en porciones de 50 gramos y ve procesando hasta obtener una consistencia cremosa. Poco a poco agrega el aceite y sigue procesando hasta que obtengas la mantequilla.

5. Mantequilla de avellana: la avellana es una nuez de sabor chocolatoso, rica en vitamina E, A y C, y una excelente fuente de grasas buenas que nos ayudan a nivelar colesterol en el organismo, siempre que no esté endulzada por supuesto. Para preparar esta mantequilla necesitas 250 gramos de avellanas, un procesador y mucha paciencia. Llévalas al horno durante 10 minutos a 180º revisando que no se quemen. Retíralas y deja enfriar. Luego llévalas al procesador y con una espátula ve removiendo lo que queda en las paredes para evitar grumos, hasta lograr una consistencia cremosa.

Como puedes ver, la mayoría de las recetas de nueces se preparan de la misma manera. Puedes jugar con los sabores según tu gusto y adicionarles troncos de chocolate, azúcar, stevia o miel. Recuerda que mientras más naturales, más propiedades tendrán con miles de beneficios para tu salud. ¡Anímate a hacer tus propias mantequillas caseras!