InicioSalud y bienestar11 beneficios de caminar descalzo que te sorprenderás

Los pies tienen muchas terminaciones nerviosas y al caminar descalzos estimulamos nuestros puntos de energía. Si lo hacemos sobre superficies naturales, como la hierba o la arena, además mejoraremos la circulación.

1. Mejora la distribución del peso sobre el pie

Algunos tipos de zapatos pueden alterar la distribución del peso sobre los pies. Los que más lo hacen son los de tacón, los cuales son muy comunes en los entornos labores. Las mujeres son quienes usan los tacones de mayor altura, algunas veces bajo una frecuencia desaconsejada. 

Según los estudios partir de los seis centímetros de tacón, el 90 % del peso recae sobre el antepié y los dedos y el restante 10 % en el retropié. En cambio, al andar descalzos, el pie se apoya tanto en el talón como en la punta de los dedos. El impacto del peso del cuerpo está más repartido y evitamos sobrecargas en algunos puntos.

2. Menor esfuerzo al caminar

Cuando se usan tacones, así sea de pocos centímetros, el cambio de posición antes mencionado hace que exista también mayor tensión algunos músculos, por ejemplo en la pantorrilla.

Se sabe que altera la función normal de las articulaciones del tobillo y la rodilla, y la espalda baja también se ve afectada. La longitud del paso y el equilibrio se comprometen de igual modo, lo que en conjunto supone un esfuerzo mayor al caminar.

Pero, con la pisada descalza, al ser mejor distribuida y más amortiguada, nos esforzamos menos al caminar. Andar descalzo puede ayudar a paliar el cansancio de la jornada luego de utilizar zapatos todo el día.

3. Descansamos el pie

No necesitamos recurrir a ninguna investigación para darnos cuenta de que, apenas llegar a la casa y descalzarnos nos ayuda a sentir alivio en los pies, descansando de andar todo el día con zapatos.

4. Dolores de espalda

Según los estudios, el uso de calzado inadecuado, y particularmente tacones, está relacio­nado con ajustes posturales que pueden favorecer la aparición de dolor lumbar. Por tanto, andar descalzos también contribuye a reducir o prevenir los problemas de espalda.

5. Estimula la circulación

De acuerdo con los resultados de una investigación, estar en contacto directo con la tierra, en este caso al ir sin zapatos, mejora la circulación de la sangre, propiciando que se impulse de mejor manera hacia el corazón.

6. Relajación muscular

Si caminamos en la arena fina, estaremos al mismo tiempo masajeando los pies y aliviando la tensión en los músculos, producto de la sobrecarga por el mal calzado, el estar todo el día de pie o sentados.

7. Terapia antiestrés

Caminar sin zapatos es una actividad más que relajante. Nos hace sentirnos libres. De hecho, como normalmente se hace en espacios al aire libre, ayuda a desbloquear las emociones, disminuyendo la ansiedad y el estrés..

8. Mejora la mecánica de la pisada

Si caminamos sin calzado por superficies irregulares, el pie tratará de adaptarse a ese medio, por lo que hará un trabajo diferente al que está acostumbrado dentro del zapato.

9. Reaprendizaje del caminar

Otro de los beneficios de andar descalzos es que desarrollamos mejor la propiocepción con respecto a esa parte del cuerpo. Esto también permite corregir los desequilibrios en los movimientos.

10. Fortalecimiento muscular

Podemos ir fortaleciendo músculos, tendones, articulaciones y huesos de los pies y tobillos. Incluso, da fuerza en los músculos de las caderas y las piernas, mejorando el equilibrio y la forma de andar, más ágilmente.

11. Prevención y control de hongos

Sin zapatos sudamos menos en esa zona, y al no haber tanta humedad, se reduce la posibilidad de desarrollar hongos en los pies. De hecho, una de las recomendaciones que se hace cuando hay este tipo de problemas es andar con calzado abierto.