Tertulia virtual: Trilogía + 1
En el marco del regreso a las funciones presenciales, el Teatro Municipal de Santiago organizó una Tertulia Virtual donde podrás conocer los detalles de este hermoso ballet.
Aunque el frío nos paralice, no nos resignamos a tener los jarrones vacíos sólo porque estemos en invierno. Y es que sabemos que decorar con flores en invierno no sólo es posible, sino además una fantástica idea para darle algo de vida a nuestros interiores, más apagados durante los meses fríos. Y es que hay muchísimas variedades de plantas y flores que adoran el frío y las bajas temperaturas… .
La Camelia
La Camelia es una preciosa flor llena de color y sinuosas formas, capaz de alegrarnos el invierno más crudo. Y es que dentro de la familia de las camelias, hay algunas variedades capaces de resistir temperaturas muy bajas y de obsequiarnos con una inesperada nota de color entre el blanco puro de la nieve. Esta flor originaria de Oriente presenta, además de unas maravillosas flores, hojas gruesas de color verde oscuro que a menudo se utilizan para preparar infusiones, y sometida a buenos cuidados la planta puede llegar a vivir la friolera de 100 años. Una opción genial para ir a contracorriente y sorprender en pleno invierno.
Las bayas de invierno
Las bayas de invierno son frutos muy utilizados en decoración invernal y navideña, pero aunque estén mucho más vistas que otras opciones florales, son sin duda una de las mejores elecciones para llenar la casa de colores cálidos en pleno invierno. Nos consta que saben perfectamente cómo decorar vuestra casa con bayas de invierno; pero quizá no saben que también pueden plantarlas en primavera/otoño y decorar la casa con el rojo intenso de los frutos que vuestra propia planta les va a regalar.
Membrillero de flor
Otra variedad procedente de Asia excelente para llenar de color cualquier entorno. El membrillero de flor o membrillero japonés es un arbusto cuyo punto álgido de floración se da hacia finales de invierno y que es ideal para aportar colores intensos y vida a cualquier jardín invernal. Un truco: si cortas las ramas antes de que hayan florecido y las pones en un jarrón con agua, florecerán en el interior de la casa al poco tiempo, ofreciéndonos un arreglo floral ‘vivo’ que se despliega y florece según pasan los días.
