Es importante tomar en cuenta las intolerancias alimentarias, problemas de masticación y deglución, así como padecimientos gastrointestinales comunes en las personas de edad avanzada para poder planear menús a base de plantas nutritivos y adecuados.
Se recomiendan los alimentos suaves como verduras y frutas cocidas o al vapor, cereales como la avena, arroz y productos de trigo integrales, porciones de leguminosas suficientes según la tolerancia de cada persona y evitar alimentos irritantes, picantes o muy condimentados.
También es muy importante asegurarse de incluir los siguientes grupos de alimentos:
FARINÁCEOS:
Cereales, pan, pasta, mijo, arroz, avena, copos de cereales, etc. y tubérculos como papas, camote y yuca. Es preferible comer los cereales y sus derivados integrales, reducidos en sodio y sin azúcar añadida.
FRUTAS, VERDURAS Y HORTALIZAS:
Se recomienda consumir de todo tipo según la tolerancia de cada persona, y preferentemente frescas, de temporada y de producción local. En el caso de las frutas, es aconsejable consumirlas enteras o en trozos, ya que los zumos o jugos no contienen fibra.
ALIMENTOS PROTEICOS:
Legumbres y sus derivados, como porotos, lentejas, garbanzos, habas, soya, tofu, tempeh, seitán, y frutos secos como maní, nueces, almendras, semillas de girasol, etc. (según tolerancia).
Tempeh
Es un alimento originario de Indonesia, procedente de la fermentación controlada de legumbres, tales como: poroto de soya, garbanzos, arvejas, porotos negros y rojos, entre otras.
Es una excelente fuente de proteínas vegetales de alta calidad, considerado uno de los pilares fundamentales en la alimentación de personas veganas, vegetarianas, deportistas y todos aquellos que quieran mejorar su flora intestinal, alimentándose de manera sana y saludable.
Seitán
Es una preparación a base de trigo que se obtiene al lavar la masa de la harina de este grano, con el objetivo de quitarle el almidón y quedarse únicamente con la proteína, es decir, con el gluten. Este se hierve con algunos otros ingredientes para condimentarlo y posteriormente preparar una gran variedad de platillos vegetarianos o veganos, ya que actúa como un sustituto de la carne animal, al tener una textura muy parecida.
SUSTITUTOS DE LÁCTEOS:
Bebidas, quesos y yogures vegetales hechos con soya, avena, almendras, coco, etc., enriquecidos con calcio y sin edulcorantes ni saborizantes artificiales.
ACEITES:
Aceites y margarinas vegetales, en porciones moderadas.
SUPLEMENTOS:
Si se sigue una alimentación vegana (sin productos de origen animal), se recomienda tomar un suplemento de vitamina B12. Los demás suplementos de vitaminas y/o minerales solo se deberán tomar en caso de deficiencia diagnosticada y bajo supervisión de profesionales calificados.
Ahora ya tienes toda la información que necesitas para llevar una alimentación vegana adecuada si eres una persona mayor, o si tus familiares o amigos mayores desean hacer la transición hacia una alimentación a base de plantas. No solo será deliciosa y saludable, también compasiva con los animales y el ambiente.