Una compra en el supermercado saludable no significa que sea costosa. Es común creer que todo lo más “sano” cuesta más que los alimentos normales. Sin embargo, la mayoría de alimentos que nos hacen bien y protegen nuestra salud son los más básicos y sencillos. Aquí te contamos cómo escoger alimentos saludables sin gastarte una fortuna ni dejar de comer lo que más te gusta:
El primer paso es planificar lo que vas a comer durante la semana. Elige alimentos frescos y naturales: frutas, verduras, granos, grasas buenas, arroz, avena, y proteínas preferiblemente orgánicas, es decir, sin aditivos: pechugas de pollo, carne magra, pescado fresco.
Revisa muy bien la fecha de caducidad de los alimentos. Aunque muchos duran más de la fecha que dice en el empaque, es posible que se dañen y sea un desperdicio de comida y de dinero. Evita los alimentos muy procesados o enlatados, por lo general, no son tan saludables y son mucho más costosos.
Siempre que vayas al supermercado lleva una lista con lo que debes comprar y ojalá con las cantidades. Dale una mirada a tu despensa y piensa bien qué quieres comer y qué quieres evitar. Aunque los dulces o snacks son ricos de vez en cuando, trata de no comprarlos,. Mientras más sano comas en casa, mejor. Deja los antojos para una cena o almuerzo en un restaurante.
Bebidas endulzadas como gaseosas, tés en polvo, licores, o jugos envasados aumentan el costo de la cuenta del supermercado y no son tan sanos. Opta por comprar aromáticas naturales o hierbas para preparar tus infusiones y en casa, bebe agua de la llave con tus comidas. Puedes comprar un filtro de agua para mejorar su sabor.
Cómo elegir alimentos en el supermercado de modo más saludable es, en conclusión, la elección de productos naturales y básicos. Todo lo que venga de la tierra es bienvenido. Recuerda lavar y desinfectar muy bien los alimentos al llegar a casa y llevar tus propias bolsas reutilizables al supermercado.